El efluvio telógeno es un tipo de pérdida de cabello que ocurre cuando un gran número de folículos pilosos entran prematuramente en la fase telógena, que es la fase de reposo del ciclo de crecimiento del cabello. En condiciones normales, aproximadamente el 80-90% de los folículos pilosos están en la fase anágena (fase de crecimiento activo) y el 10-20% están en la fase telógena. Sin embargo, durante el efluvio telógeno, una mayor proporción de folículos pilosos entra en la fase telógena al mismo tiempo.
Situaciones como el estrés la cirugía, enfermedad grave, pérdida de peso rápida o eventos traumáticos pueden contribuir al efluvio telógeno.
El tratamiento del efluvio telógeno generalmente implica abordar la causa subyacente que está provocando la pérdida de cabello. Aquí hay algunas estrategias comunes que pueden ayudar:
Gestión del estrés: Si el estrés es un factor desencadenante, la gestión del estrés puede ser crucial. Se pueden practicar técnicas de relajación, como la meditación, el yoga o la terapia cognitivo-conductual.
Corrección de deficiencias nutricionales: Si se identifican deficiencias nutricionales, se puede recomendar una dieta equilibrada o suplementos específicos para abordar esas carencias.
Tratamiento hormonal: En casos donde los desequilibrios hormonales sean responsables, se puede considerar la terapia hormonal bajo la supervisión de un médico.
Ajuste de medicamentos: Si la pérdida de cabello es un efecto secundario de ciertos medicamentos, es posible que se deba ajustar la dosis o cambiar a una alternativa si es posible. Esto debe hacerse en consulta con un profesional de la salud.
Estimulación capilar: Algunos tratamientos tópicos o dispositivos, como minoxidil, pueden ayudar a estimular el crecimiento del cabello. Sin embargo, es importante consultar a un profesional antes de comenzar cualquier tratamiento, ya que la efectividad puede variar según la persona y la causa subyacente.
Cuidado capilar adecuado: Evitar tratamientos agresivos para el cabello, como tintes químicos, calor excesivo y peinados tirantes, puede ayudar a minimizar la caída del cabello y proteger los folículos.
Consulta con un dermatólogo: Si la pérdida de cabello persiste o es significativa, se recomienda buscar la orientación de un dermatólogo. Este especialista puede realizar pruebas y evaluaciones para identificar la causa subyacente y recomendar un plan de tratamiento personalizado.
Es importante destacar que, en la mayoría de los casos, el efluvio telógeno es reversible y el cabello volverá a crecer una vez que se aborda las causas subyacentes. Sin embargo, el éxito del tratamiento puede variar según la causa específica y la respuesta individual de cada persona.
Preguntas frecuentes sobre Efluvio telógeno
El diagnóstico se realiza principalmente a través del historial médico del paciente y un examen físico del cuero cabelludo. En algunos casos, pueden realizarse pruebas adicionales, como análisis de sangre para descartar deficiencias nutricionales o trastornos hormonales, y biopsias del cuero cabelludo para examinar los folículos capilares.
No, el efluvio telógeno generalmente es temporal. La mayoría de las personas experimenta una regeneración completa o parcial del cabello una vez que se resuelve la causa subyacente, aunque esto puede tomar varios meses.
Mantener un estilo de vida saludable, incluyendo una dieta equilibrada rica en vitaminas y minerales esenciales, manejar el estrés de manera efectiva, y evitar tratamientos capilares agresivos puede ayudar a prevenir esta condición. Es también importante consultar a un dermatólogo ante los primeros signos de pérdida de cabello.
Aunque es más común en mujeres, especialmente después del embarazo debido a los cambios hormonales, el efluvio telógeno puede afectar a personas de cualquier género y edad, dependiendo de la causa subyacente.
La recuperación del cabello después de un episodio de efluvio telógeno varía de persona a persona, pero generalmente el cabello comienza a crecer de nuevo de manera normal dentro de 3 a 6 meses después de que se elimina la causa desencadenante. En algunos casos, puede tomar un poco más de tiempo para que el volumen del cabello vuelva a su estado normal.
Diferenciar el efluvio telógeno de otras formas de pérdida de cabello generalmente requiere la evaluación de un dermatólogo. El efluvio telógeno se caracteriza por una pérdida de cabello difusa y generalizada sin calvas completas, a diferencia de la alopecia areata, que presenta parches de calvicie. A diferencia de la alopecia androgenética, el efluvio telógeno no sigue un patrón específico de pérdida de cabello y es reversible
Aunque el estrés severo es una causa común de efluvio telógeno, no todos los episodios de pérdida de cabello se deben al estrés. Otras causas incluyen cambios hormonales, enfermedades, medicamentos, y deficiencias nutricionales. Es importante evaluar otros factores potenciales antes de atribuir la pérdida de cabello únicamente al estrés.
Los suplementos vitamínicos pueden ser útiles en casos donde la pérdida de cabello se debe a deficiencias nutricionales. Sin embargo, tomar suplementos sin una deficiencia confirmada puede no ser beneficioso y, en algunos casos,
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Dr. Rubén Arenas.